Puerto Príncipe, 24 de febrero – La crisis de seguridad en Haití se agrava mientras bandas armadas controlan el 85% de la capital, generando desplazamientos masivos y una ola de protestas. Manifestantes han bloqueado calles, incendiado barricadas y lanzado piedras para exigir condiciones seguras que les permitan regresar a sus hogares. Paralelamente, la Policía Nacional de Haití (PNH) se ha sumado a las manifestaciones, pidiendo mejores recursos para enfrentar la violencia.
Protestas, linchamientos y el asesinato de un oficial keniano
En barrios como Solino y Canapé-Vert, residentes han salido a las calles denunciando la falta de acción del gobierno ante la expansión de las pandillas. En algunas zonas, la frustración ha derivado en linchamientos de presuntos pandilleros, mientras disparos esporádicos continúan en Fort National y Carrefour-Feuilles. La violencia en 2024 dejó más de 5,600 muertos, 2,200 heridos y casi 1,500 secuestros, según datos de la ONU.

Ante este escenario, agentes de la PNH, agrupados en el Sindicato SPNH-17, protestaron frente a la sede del primer ministro exigiendo vehículos blindados, drones, helicópteros y armamento adecuado. "¡Abajo este programa de inseguridad! ¡Viva la Policía! ¡Viva el Ejército!", clamaban los oficiales, mientras su líder sindical, Garry Jean Baptiste, instaba al gobierno a tomar la crisis con seriedad.
A pesar de la intervención de la Fuerza Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), liderada por Kenia, las bandas continúan expandiendo su control. Este fin de semana, un oficial keniano fue asesinado en una operación conjunta con la PNH en Artibonite, convirtiéndose en la primera baja de la MSS desde su despliegue en junio de 2024.
El Ministerio de Defensa de Haití lamentó el fallecimiento y destacó su valentía, mientras que la ONG Human Rights Watch (HRW) instó a la ONU a desplegar una misión de paz con mayor alcance para intentar restablecer la estabilidad.
Mientras tanto, el país sigue sumido en el caos, con miles de desplazados, una población aterrorizada y una crisis sin una solución clara a la vista.
