Santo Domingo, 24 de febrero – El presidente Luis Abinader anunció la presentación de un nuevo proyecto de ley ante el Congreso Nacional para endurecer las sanciones contra la trata de personas. Además, el Gobierno implementará medidas más estrictas en la frontera con Haití, en respuesta a la creciente crisis en el país vecino.
Endurecimiento de las leyes y refuerzo de la seguridad fronteriza
Durante su rueda de prensa semanal, Abinader subrayó la necesidad de aplicar sanciones más severas contra el tráfico de personas. “Nuestras leyes deben ser mucho más drásticas en este tema, especialmente en la frontera”, afirmó el mandatario. La nueva legislación busca imponer penas más rigurosas y fortalecer las herramientas legales contra esta problemática.
Esta iniciativa representa la tercera modificación impulsada por su Gobierno en este ámbito. En octubre pasado, se promulgó la Ley 63-24, que aumentó las penas contra el tráfico ilícito de migrantes y la trata de personas, estableciendo condenas de hasta 20 años de prisión y multas equivalentes a 175 salarios mínimos.
En paralelo, el Gobierno anunció el reforzamiento de la seguridad fronteriza con un despliegue más amplio de operativos migratorios. Según el director de Migración, Luis Rafael Lee Ballester, se incorporarán más vehículos y tecnología para la repatriación de indocumentados. La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, reafirmó el compromiso del Ejecutivo con la seguridad nacional y el control de la inmigración irregular.
Actualmente, más de 10,000 militares, en su mayoría del Ejército, están apostados en la frontera. Además, se confirmó la ampliación del muro fronterizo en Dajabón, que se extenderá 10 kilómetros adicionales hasta los municipios de Capotillo y Restauración.
El canciller Roberto Álvarez instó a la comunidad internacional a incrementar el apoyo financiero a la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití, argumentando que la asistencia humanitaria es clave para evitar una crisis migratoria incontrolable.
Ante las críticas de organismos internacionales por las deportaciones de haitianos, Abinader defendió la política migratoria del país. “Nadie, absolutamente nadie, ni un Estado ni una organización privada, puede disponer ni criticar las acciones que tomamos para proteger la integridad y la paz en nuestro territorio”, afirmó. Desde octubre pasado, el Gobierno ha intensificado las repatriaciones, con un promedio de 10,000 expulsiones semanales.
En el plano económico, el mandatario destacó que, si bien el crecimiento del país ha sido constante, no resuelve automáticamente todos los problemas. Aseguró que el aumento en la tasa del dólar responde a factores externos, como la inflación en Estados Unidos y el alza en las tasas de interés. También desmintió que exista escasez de arroz en el país, destacando la fortaleza del mercado gracias a sectores como el turismo y las exportaciones.
Finalmente, Abinader adelantó que su Gobierno evalúa un posible aumento salarial en el sector público, en respuesta a los bajos ingresos de algunos trabajadores.